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Crissier, ubicado en el corazón de Suiza, es un destino ideal para explorar independientemente con un coche de alquiler. Con su hermoso paisaje natural, edificios históricos y la cercanía a metrópolis más grandes, Crissier tiene algo para todos.
Crissier es una pequeña ciudad en el distrito de Lausanne del cantón de Vaud. Con sus encantadoras calles estrechas, sus antiguas casas y su hermosa iglesia de Notre-Dame de l'Assomption del siglo XVII, Crissier es un testamento bien conservado del encanto histórico de Suiza.
El tráfico en Suiza es muy respetado, y Crissier no es una excepción. El límite de velocidad en áreas urbanas es normalmente de 50 km/h, pero puede ser tan bajo como 30 km/h en algunas áreas residenciales. Los aparcamientos están bien señalizados y generalmente están disponibles tanto en la calle como en garajes de estacionamiento privados.
Una de las principales atracciones de Crissier es el famoso restaurante Hotel de Ville, galardonado con tres estrellas Michelin. También hay varias rutas de senderismo y ciclismo alrededor de la ciudad y en la campiña cercana.
Los precios del combustible en Suiza son generalmente más altos que el promedio europeo. Pero la mayoría de las estaciones de servicio ofrecen servicios completos, incluyendo tiendas, por lo que puede valer la pena el costo adicional.
La ventaja de tener un coche cuando visitas Crissier es que puedes explorar fácilmente las ciudades más grandes y las bellezas naturales de los alrededores. Lausanne, la capital del cantón de Vaud, está a sólo 20 minutos en coche y ofrece muchas atracciones, incluyendo el Museo Olímpico y la hermosa catedral gótica de Lausanne.